Antecedentes y objetivo: Los resultados percibidos por el paciente (PROMs) son herramientas clave para avanzar hacia una práctica clínica centrada en el paciente, con beneficios demostrados para su estado de salud. Aunque su implementación se ha extendido en diversas enfermedades crónicas, existen pocas experiencias en personas candidatas a trasplante renal (TR), una población cada vez más envejecida y frágil. El objetivo de este estudio fue evaluar la relación entre fragilidad y calidad de vida autoreportada relacionada con la salud en personas con enfermedad renal crónica avanzada (ERCA) candidatas TR.
Material y métodos: Se incluyeron candidatos a TR evaluados en la consulta de acceso al TR. Se administraron los cuestionarios PROMIS-29® y PROMIS-Global Health® y se calculó el T-score para cada dominio. La fragilidad se evaluó mediante la escala de Fried, agrupando como frágiles/prefrágiles (FRIED>0). También se recogieron variables sociodemográficas y clínicas.
Resultados: De un total de 139 pacientes incluidos, el 32% eran mujeres y la edad media fue de 63,5 años, el 43,9% estaba en diálisis y el 64,5% tenían algún grado de fragilidad. El 71,2% contestaron los cuestionarios administrados. De forma global, los candidatos a TR tuvieron una percepción de su estado mental como buena (48±7,4) y estado físico como regular (42,8±7,3). Las puntuaciones de ansiedad, fatiga, habilidades sociales, alteración del sueño, dolor y depresión estaban dentro del rango normal comparado con la población general. Cuando comparamos a los pacientes frágiles con los robustos, solo el dominio físico de PROMIS-Global-Health® y la función física de PROMIS-29® fueron peores en el grupo de pacientes con algún grado de fragilidad. No se encontraron diferencias en el resto de los dominios.
Conclusiones: Los candidatos a TR frágiles presentan una peor percepción de su función física medida con herramientas PROMs. La implementación sistemática de PROMs podría facilitar estrategias dirigidas a mejorar los resultados en salud, optimizando el seguimiento en lista de espera y el acceso al trasplante.
Background and Objective: Patient-reported outcomes (PROMs) are key tools for advancing patient-centered clinical practice, with proven benefits for health outcomes. Their application has been extended to different chronic diseases, but there are few studies involving patients with chronic kidney disease (CKD), a population that is aging and frail. The aim of this study was to assess the relationship between frailty and self-reported health-related quality of life in patients with advanced CKD who are eligible for kidney transplantation (KT).
Materials and Methods: KT candidates who were evaluated in the outpatient clinic were included in the study. The PROMIS-29® and PROMIS-Global Health® questionnaires were administered, and T-scores were calculated for each domain. Frailty was assessed using the Fried scale, categorizing participants as frail/pre-frail if FRIED>0. Sociodemographic and clinical variables were also collected.
Results: 139 KT candidates were included in the study: 32% were women, the mean age was 63.5 years, 43.9% were on dialysis, and 64.5% were frail. 71.2% responded to the administered PROMIS. Overall, KT candidates reported their mental health as good (48±7.4) and their physical health as fair (42.8±7.3). T-scores for anxiety, fatigue, social functioning, sleep disturbance, pain, and depression were within the normal range compared to the general population. When comparing frail with robust patients, only the physical domain of PROMIS-Global Health® and physical function of PROMIS-29® were worse in the frail group. No differences were found in the other domains.
Conclusions: Frail kidney transplant candidates report worse physical function when assessed using PROMs tools. The systematic implementation of PROMs might help to implement strategies to optimize access to the waiting list, improve postKT outcomes, and enhance overall patient care.