Información de la revista
Vol. 28. Núm. 6.Diciembre 2008
Páginas 572-666
Vol. 28. Núm. 6.Diciembre 2008
Páginas 572-666
DOI:
Acceso a texto completo
Resultados del proyecto de mejora de la calidad de la asistencia en hemodiálisis: estudio multicéntrico de indicadores de calidad de la Sociedad Española de Nefrología (SEN)
Preliminary results of the Spanish Society of Nephrology multicenter study of quality performance measures: hemodialysis outcomes can be improved
Visitas
16575
Grupo de Gestión de Calidad de la SEN, Jose Mª Alcázarb, Mª Dolores Arenasc, Fernando Álvarez-Uded, Rafael Virtoe, Esther Rubiof, Francisco Maduellg, Pilar Fernández-Crespoh, Manuel Angoso de Guzmáni, Ramón Delgadoj, Carmen Santamaríak, Manuel A. Alonsol, Sara Anayam, Antoni Bordilsn, Andrés Antolínn, Emilio Gonzalez-Parrao, Isabel Pérezo, Álvaro Molina Ordásp, Mercedes Fernándezq, Pablo Molinar..., Pilar Sánchezr, Francesc Barbosas, Luisa Palomares Sollat, José Lacuevau, Guillarmina Barrilv, José Mª Pastorw, Carmen Gámez Matíasx, Pablo Mateos Hernándezx, Miguel Fulquet Nicolasy, Francisco Ríosz, Pablo Rebolloaa, Eduardo ParraabVer más
b Hospital 12 de octubre, Madrid, Madrid, España,
c Hospital Perpetuo Socorro, Alicante, Elche y Elda, Alicante, España,
d Hospital General de Segovia, Segovia, Segovia, España,
e Hospital San Jorge, Huesca, Huesca, España,
f Centro Los Llanos, Móstoles, Madrid, España,
g Hospital Clinic Barcelona, Barcelona, Barcelona, España,
h Institut Mèdic Badalona, S.L., Barcelona, Barcelona, España,
i Hospital Virgen del Consuelo, Valencia, Valencia, España,
j Clínica Ruber, Madrid, Madrid, España,
k Centro Cediat-Torrente Alcer Turia, Valencia, Valencia, España,
l Valle del Nalón-Langreo-Asturias, Asturias Asturias, España,
m Hospital General de Ciudad Real, Ciudad Real, Ciudad Real, España,
n Centro Cediat- Aldaia Alcer Turia, Valencia, Valencia, España,
o Centro «Los Pinos-FRIAT» de Medina del Campo, Valladolid, Valladolid, España,
p Hospital General de Segovia, 15Centro «Los Olmos». FRIAT, Segovia, Segovia, España,
q Fundación Calahorra, La Rioja, La Rioja, España,
r Hospital Francesc de Borja de Gandia, Valencia, Valencia, España,
s Hospital del Mar, Barcelona, Barcelona, España,
t Hospital FRIAT Os Carballos, Vigo, Vigo, España,
u Centro Cediat-LLiria Alcer Turia, Valencia, Valencia, España,
v Hospital Universitario de la Princesa, Madrid, Madrid, España,
w Clínica Benidorm, Benidorm, Alicante, España,
x Unidad de Diálisis Madrid Oeste S.A., Madrid, Madrid, España,
y Hospital de Terrassa, Terrassa, Barcelona, España,
z Centro ICN San Luciano, España,
aa BAP Health Outomes, Oviedo, Asturias, España,
ab Hospital Reina Sofía de Tudela, Navarra, Navarra, España,
Ver más
Este artículo ha recibido
Información del artículo
Resumen
Texto completo
Bibliografía
Descargar PDF
Estadísticas
RESUMEN Introducción: En el año 2002 se creó el grupo de trabajo sobre Calidad en Nefrología de la SEN (CNSEN). Los objetivos de este grupo han sido la identificación, difusión, implantación y consolidación de una herramienta de Gestión de la Calidad en Hemodiálisis, sistemática, objetiva y global, basada en la recopilación de Indicadores de Calidad, las estrategias de retroalimentación (Feedback) y Benchmarking, y el diseño de Planes de Mejora y Evaluación Global. El objetivo de este estudio es presentar los primeros resultados de los indicadores de calidad obtenidos en un grupo de centros españoles, así como evaluar la repercusión de la aplicación de las mencionadas técnicas en los resultados obtenidos. Métodos: Durante 2007 se ha ido incorporando al estudio un total de 28 unidades de hemodiálisis de todo el ámbito nacional. El número total de pacientes evaluados a lo largo del estudio ha sido 2516. Los indicadores han sido recogidos mediante un software informático específico de calidad, que permite calcularlos con facilidad. Los indicadores de cumplimiento se refieren a las siguientes áreas: adecuación de diálisis, anemia, metabolismo mineral y óseo, nutrición, enfermedades víricas, accesos vasculares, mortalidad, morbilidad (ingresos hospitalarios) y trasplante. Cada tres meses los centros reciben sus datos comparados con los del resto del grupo. Resultados: Se detectó una mejora de los resultados a nivel global, excepto en los niveles de hemoglobina. El porcentaje de centros que alcanzaron los estándares definidos por el CNSEN pasó del 65% al 90,9% en el caso del estándar de Kt/V Daugirdas II (> 1,3 en > del 80% de sus pacientes); del 71,4 % al 77,2 % en el caso del estándar de PTH (> 30% de sus pacientes con PTH entre 150 y 300 pg/ml); y del 42,8% al 63,5% en el caso del estándar de fósforo (> 75% de sus pacientes con fósforo < 5,5 mg/dl). Más del 50% de los centros mejoraron sus resultados con respecto al inicio del estudio en todas las áreas analizadas. Los centros que no obtuvieron una mejora en sus resultados partían de porcentajes de cumplimiento de los indicadores significativamente más altos que aquellos que si lograron mejorarlos (80,6 ± 15,4 versus 71,8 ± 16,6 respectivamente; p < 0,001). Conclusiones: Estamos avanzando en lo referente al conocimiento de los resultados de la hemodiálisis, aunque el trabajo pendiente todavía es extenso. La monitorización de indicadores de calidad respecto a un estándar, y su puesta en común con otros centros puede contribuir a la mejora de resultados y a la disminución en la variabilidad entre centros.
Palabras clave:
Sistema de gestión de calidad
Palabras clave:
Indicadores de calidad
Palabras clave:
Hemodiálisis
Palabras clave:
Calidad
SUMMARY Introduction: The Spanish Society of Nephrology «Quality in Nephrology Working Group» (QNWG) was created in 2002. The aims of this group are the identification, diffusion, implementation and consolidation of a systematic, objective and comprehensive set of quality performance measures (QPMs) to help along the improvement of patient care and outcomes on hemodialysis, by means of strategies of feedback and benchmarking, and the design of quality improvement projects. The objective of this study is to present the preliminary results of a set of quality performance measures obtained in a group of Spanish hemodialysis centers, as well as to evaluate the repercussion of the application of the aforementioned thecniques on the observed results. Methods: During 2007 a total of 28 hemodialysis units participated in the study; 2,516 patients were evaluated. A specific software was designed and used to facilitate the calculation of CPMs in each unit. The clinical indicators used refered to dialysis adequacy; anemia; mineral metabolisme; nutrition; viral infections; vascular access; mortality, morbidity (number and days of hospital admissions); and renal transplant. Every three months each center received its own data and its comparison with the rest of the group. Results: Except for hemoglobin levels we observed a global improvement. The percentage of centers reaching the stablished standards defined by the QNWG passed from 65% to 90.9% for Kt/V Daugirdas II (> 1.3 in > that 80% of the patients); from 71.4% to 77.2% for PTH (> 30% of patients with serum PTH between 150 and 300 pg/ml); and from 42.8% to 63.5% for phosphate (> 75% of patients with a serum phsphate < 5.5 mg/dl). More than 50% of centers showed an improvement in their final results as compared with their own initial results in all analyzed CPMs. Those centers that did not obtained an improvement in their results started the study with better percentages of acomplishment than those that showed a significant improvement in QPMs. (80.6 ± 15.4 versus 71.8 ± 16.6 respectively; p < 0.001). Conclusions: We are starting to make progresses in our knowledge of clinical results in our hemodialysis units, although there is still a long way to go over. To monitor and share CPMs results within hemodialysis centers might help to improve their results as well as to reduce intecenters variability.
Keywords:
Health quality management system
Keywords:
Clinical performance measures
Keywords:
Hemodialysis
Keywords:
Quality
Texto completo

INTRODUCCIÓN

Según los informes del registro de la Sociedad Española de Nefrología (SEN)[1], en el año 2005, unos 27.765 pacientes recibían tratamiento renal sustitutivo en España, de los cuales el 50 % estaba en hemodiálisis. A pesar de su indudable impacto social y económico[2], aún desconocemos aspectos esenciales del tratamiento renal sustitutivo, tales como estándares adecuados, mortalidad ajustada por riesgo o costes.

Numerosos estudios han demostrado que la consecución de algunos resultados intermedios, por ejemplo los que se refieren a la anemia, la dosis de diálisis, el metabolismo calcio-fósforo, los niveles de albúmina o el tipo de acceso vascular, está fuertemente asociada a la morbimortalidad del paciente[3],[4]. Por otra parte, existe un efecto centro (variabilidad de los resultados atribuible a la calidad de la asistencia prestada) que puede mitigarse con determinadas intervenciones[5]

En el año 2002 se creó un grupo de trabajo de la SEN sobre Calidad en Nefrología (www.senefro.org), entre cuyos objetivos figuraba la identificación, difusión, implantación y consolidación de una herramienta de Gestión de la Calidad en Hemodiálisis, sistemática, objetiva y global, basada en la recopilación de Indicadores de Calidad, las estrategias de retroalimentación (Feedback) y Benchmarking, y el diseño de Planes de Mejora y Evaluación Global. En la actualidad, más de setenta profesionales provenientes de diversas disciplinas (nefrólogos, estadísticos, informáticos y epidemiólogos) forman parte de este grupo.

Tras la elaboración y difusión de una batería de Indicadores de Calidad en hemodiálisis[6], el grupo de trabajo desarrolló una herramienta informática para facilitar su cálculo, cuya implantación en diversos centros se inició en Octubre de 2006. Durante el año 2007 se ha realizado la recogida de estos indicadores con una periodicidad trimestral. En principio, se desconoce si los estándares y objetivos planteados ¿a priori¿ en la propuesta inicial del grupo de indicadores de calidad 6 y en las diferentes guías [7], [8], [9] se adecuan a la realidad de nuestra población y en qué medida se cumplen. Por otra parte, otros estudios han demostrado que el seguimiento de indicadores de calidad[10] y su puesta en común con otros centros[11] permite conseguir una mejora de los resultados obtenidos. Con el propósito de dar respuesta a estas cuestiones y de tener conocimiento de las áreas de mejora más relevantes del proceso de hemodiálisis, se desarrolló este estudio multicéntrico.

El objetivo del presente trabajo es presentar los primeros resultados sobre indicadores de calidad obtenidos en un grupo de centros españoles, así como evaluar la repercusión de la aplicación de las mencionadas técnicas en los resultados obtenidos.

MATERIAL Y METODOS

Diseño del estudio

Estudio descriptivo poblacional de los resultados de indicadores de calidad obtenidos en los centros participantes.

Estudio comparativo antes-después tras la puesta en común de los valores agregados de los indicadores de todos los centros.

Pacientes

Durante el año 2007 se ha ido incorporando al estudio un total de veintiocho unidades de hemodiálisis: once de ellas hospitalarias y trece extrahospitalarias, tanto públicas como privadas, de todo el ámbito nacional. En enero de 2007 se inició el estudio con 24 unidades de diálisis (738 pacientes) y el número de unidades y la incorporación de pacientes ha sido creciente a lo largo del año (28 unidades y 1318 pacientes en diciembre de 2007). El total de pacientes estudiados en los diferentes momentos del estudio y para el cálculo de los diferentes indicadores analizados ha sido variable, en función de la incorporación de pacientes nuevos y las bajas existentes en cada unidad, además de por la diferente periodicidad de realización de analítica de los centros en algunos indicadores. El número total de pacientes que ha sido evaluado a lo largo del estudio ha sido 2516.

No hubo ningún criterio de exclusión: todos los pacientes que estuvieran en cada unidad en el momento de la analítica, y cuyos datos estuvieran incluidos en el programa informático se incorporaron al análisis de indicadores

Indicadores analizados

Los indicadores (informativos y de cumplimiento) que han sido recogidos se distribuyen por áreas que contemplan distintos aspectos de la hemodiálisis. Entre los informativos se incluyen: datos demográficos, de comorbilidad, de la técnica dialítica (tiempo, frecuencia, tipos de membranas, flujo sanguíneo) y de los tratamientos recibidos en los campos de la anemia y del metabolismo mineral y óseo. Los indicadores de cumplimiento se refieren a las siguientes áreas: adecuación de diálisis, anemia, metabolismo mineral y óseo, nutrición, enfermedades víricas, accesos vasculares, mortalidad, morbilidad (ingresos hospitalarios) y trasplante.

Metodología

La mayoría de las unidades participantes utilizan la base de datos NefrosoftÒ 3.0 (Visual-limes) (26 unidades) o RenasoftÒ (Baxter) (2 unidades), donde se recoge toda la historia clínica de los pacientes en formato electrónico. Para este proyecto se diseñó un software informático específico de calidad, que funciona acoplado a dicha base de datos y permite calcular con facilidad los indicadores.

Tras la recepción de los indicadores obtenidos en cada centro, se agregan los resultados individuales transformándolos en unos resultados conjuntos con una perspectiva poblacional; expresados en forma de media, desviación estandar y percentil 75 de la muestra estudiada. Posteriormente se informa de forma periódica y sistemática al personal responsable de la asistencia de los resultados tanto individuales como globales.

La sistemática de trabajo ha sido la siguiente: los módulos de indicadores permiten calcular los siguientes perfiles de indicadores: perfil mensual (adecuación de diálisis, hemoglobina, calcio, fósforo, dosis de estimulantes eritropoyéticos, diferentes tratamientos), perfil bimestral (ferritina, PTH, albúmina), y perfil anual (accesos vasculares, mortalidad, comorbilidad, trasplante). Se ha respetado que cada unidad pueda calcular los indicadores con la periodicidad que él mismo establezca, en función de la periodicidad de las analíticas de su centro. A modo de ejemplo, el 45 % de los centros medía la adecuación de diálisis cada tres meses o más. Trimestralmente se genera de forma automática un fichero por cada módulo (mensual, bimestral o anual) que se envía a una dirección de Internet vinculada al programa, para su análisis estadístico. Todas las unidades aportan la totalidad de sus datos recogidos hasta el momento del envío. Una vez procesados los datos, se elabora un informe con los resultados de cada centro que se envía al investigador correspondiente, junto con un informe global con los resultados agregados de todos los centros. Los resultados de cada centro se remiten al mismo en forma de tablas en las que se muestran, para cada uno de los indicadores de cumplimiento, el número de centros de los que se disponen datos, el resultado del centro correspondiente, la media y la desviación típica del conjunto de los centros, y el percentil 75 de la muestra. Los resultados también se representan, para cada grupo de indicadores, mediante un gráfico radial o de ¿tela de araña¿ en el que el centro puede ver su posición respecto a la media de todos los centros y respecto al grupo de centros que se encuentra en el percentil 75 (valor óptimo actual), que serían los que han obtenido los mejores resultados para ese indicador. Asimismo, se aportan gráficos de la evolución del centro a lo largo del periodo estudiado para cada indicador.

Todos los resultados expresados en este trabajo hacen referencia a los valores obtenidos en cada centro. Se expresan como media ± DS de las medias de los centros y de los porcentajes de cumplimiento de los mismos, no sobre el total de pacientes estudiados.

Comparativa entre el inicio y al año del estudio

Se compararon los resultados obtenidos en el primer trimestre del estudio, cuando los centros obtuvieron sus primeros resultados y desconocían los resultados del resto de centros, con los resultados obtenidos en el último trimestre del estudio. En este análisis se incluyen un total de 24 centros que participan en el estudio desde el comienzo. Se compara el porcentaje de cumplimiento en las siguientes áreas: anemia, metabolismo férrico, adecuación de diálisis y metabolismo mineral y óseo mediante un total de 15 indicadores. Se comparan las medias de porcentajes de cumplimiento de los indicadores al inicio del estudio entre los centros que mejoran y los que empeoran sus resultados.

Análisis estadístico

Se realizó mediante el paquete estadístico SPSS 12,1. Se analizó la normalidad de la distribución de la muestra mediante el test de Kolmogorov-Smirnov. La comparación entre las medias de cumplimiento de los indicadores entre el primer trimestre del estudio y el último trimestre se realizó mediante la T de Student para datos apareados. Para comparar las medias de porcentajes de cumplimiento de los indicadores al inicio del estudio entre los centros que mejoran y los que empeoran sus resultados se utilizó el test de McNemar. El nivel estadístico de significación utilizado fue de p 88%, y la propuesta de indicadores de la SEN (> 80%). El grado de cumplimiento tras un año de estudio fue del 90% para el estándar definido en la propuesta de indicadores de la SEN y del 50% para el estándar definido en la guía de centros de hemodiálisis, observandose una mejoría en el cumplimiento en más de la mitad de los centros desde el inicio del estudio. El estudio DOPPS reveló una prevalencia del 36% de pacientes con dosis de diálisis inadecuada (Kt/V < 1,2) en España[12]. Las Guías de Centros de Hemodiálisis, asi como las guías K-DOQI, recomiendan realizar esta determinación mensualmente 18, 19 , sin embargo casi la mitad de los centros (45 %) lo hacían cada tres meses o más. Ambos resultados nos permiten detectar la existencia de oportunidades de mejora. En primer lugar, es necesario incrementar la dosis de diálisis, al menos en un 20% de los pacientes; en segundo lugar, convendría incrementar la frecuencia de su medición en el 45% de los Centros que participan en el estudio.

Con relación a la anemia, el 19% de los pacientes presentaba una hemoglobina < 11 gr/dl al inicio del estudio. Según el estándar establecido en las guías de centros de hemodiálisis, menos del 15% deberían tener una hemoglobina inferior a la mencionada, por lo que parece que un cierto porcentaje de pacientes aún podría beneficiarse de un tratamiento más adecuado de la anemia. Aunque más de la mitad de los centros mejoró sus resultados de forma global en esta área, el porcentaje de cumplimiento descendió desde el inicio al final del estudio, siendo el único indicador en el que no se observó una mejoría. Es posible que la polémica abierta respecto a la limitación de los niveles de hemoglobina en su rango superior[13], los cuales no deberían superar los 13 mg/dl[14], haya podido influir en los resultados. Por ello se considera necesario incluir en el futuro como indicador el porcentaje de pacientes con hemoglobina 75%), siendo que a lo largo del año 2007 se pasó de un cumplimiento en el 43% de los centros a un cumplimiento en el 68,5% de los mismos, y es un indicador cuyos planes y estrategia de mejora dependen en gran medida de nuestra labor para aumentar la adherencia al tratamiento de los pacientes.[19]

Aunque la medida de los niveles de albúmina es un parámetro pobre para valorar el estado de nutrición, es un factor conocido que se asocia a la mortalidad en hemodiálisis. Un 22% de los pacientes de la muestra presentaba niveles de albúmina por debajo del rango terapéutico. A la hora de valorar este indicador se ha de tener en cuenta que existe una variabilidad importante en los niveles séricos según el estado de hidratación del paciente y la técnica empleada para su determinación, además de la posible influencia de la presencia de un estado inflamatorio.

Las guías de la SEN sobre accesos vasculares (AV) establecen como objetivos de calidad que más del 80% de los pacientes incidentes dispongan de un AV desarrollado: Más del 80% de los prevalentes debería tener una fístula arteriovenosa (FAV), menos del 10% prótesis, y menos del 10% catéteres permanentes (CP). La tasa anual de trombosis de FAV debería ser inferior al 25% y la de prótesis inferior al 50%. El cumplimiento de los objetivos de calidad actualmente definidos para el área de accesos vasculares en España es muy bajo. A pesar de las diferencias de características y ubicación de los centros, la falta de cumplimiento en algunos indicadores es generalizada y con cifras muy similares. Llama la atención como los objetivos y los estándares que se marcan los países son diferentes para el mismo proceso asistencial; por ejemplo, las guías de accesos vasculares de la SEN recomiendan que el 80% de los pacientes prevalentes en hemodiálisis sea portador de una fístula arteriovenosa[20]; mientras que las guías K/DOQI establecen en ≥ 40% dicho objetivo[21], y en Canada el objetivo es > 60% [22]. Esta variabilidad puede resultar, de algún modo, más fácilmente comprensible cuando se trata de diferentes países. Sin embargo este estudio demuestra que la variabilidad existe incluso entre centros del mismo país. Habrá que plantearse una mejor planificación en el área de accesos vasculares de los pacientes incidentes así como un cambio en los objetivos más acorde con la realidad española actual, en especial en lo que se refiere a los concernientes a los catéteres permanentes y a las fístulas arteriovenosas en pacientes prevalentes.

Uno de los retos actualmente vigentes es reducir la variabilidad en la asistencia que prestamos [23] y las causas que la explican son múltiples y complejas. La medición sistemática y planificada de indicadores de calidad y su puesta en común con otros centros pueden mejorar y homogeneizar los resultados. Con la aplicación de estas herramientas (retroalimentación y ¿benchmarking) se ha podido detectar una mejora a nivel global a lo largo del periodo de estudio. Más de la mitad de los centros han mejorado sus resultados a lo largo del estudio en todos los indicadores, siendo en el área de control del calcio y del fósforo donde un mayor porcentaje de centros, en torno al 80%, consigue alcanzar los objetivos planteados. Llama la atención que los centros que han mejorado sus resultados a lo largo del estudio partían de niveles de cumplimiento mucho más bajos que los centros que no han cambiado o han empeorado sus resultados, cuyos porcentajes de cumplimiento al inicio del estudio ya eran muy elevados y dificilmente mejorables. Establecer los valores que son mejorables y los valores que se consideran adecuados y óptimos será uno de los objetivos del grupo: los resultados preliminares de este estudio ya orientan en este sentido. Algunos centros ya utilizaban previamente sistemas de gestión de calidad y aplicación de las técnicas de benchmarking y feedback, lo que probablemente explica, al menos en parte, que no se haya podido constatar una diferencia en sus resultados. El diseño de planes de mejora que aborden los problemas identificados mediante los indicadores, será una de las estrategias futuras a poner en marcha desde el grupo de Gestión de Calidad de la SEN.

Queda pendiente realizar un análisis exhaustivo para definir qué indicadores de calidad merece la pena medir y qué estándares son los más adecuados; por otra parte sólo se han discutido y comparado con los estándares propuestos por la SEN algunos de los indicadores más relevantes. A la vista de la falta de información global de los datos de la hemodiálisis en nuestro país, estos resultados pueden resultar orientativos a las unidades de hemodiálisis, si bien hay que considerar la limitación que supone el bajo número de centros participantes respecto al número global de centros que realizan la hemodiálisis en España, y el hecho de que estos centros estan especialmente implicados y concienciados con la mejora de la calidad, por lo que los resultados están sesgados y no pueden considerarse representativos de la totalidad de la población de pacientes en hemodiálisis. Cabe esperar que un mayor número de centros se adhiera a este proyecto con el fin de que los datos aportados representen realmente a la población española. Se ha realizado un esfuerzo especial en facilitar su cálculo mediante un software específico, diseñado concretamente para esta tarea, adjunto a las bases de datos de Nefrosoft®, y de Baxter® que son los programas informáticos utilizados como historia clínica electronica por la mayoría de los centros de diálisis. De esta forma los indicadores de calidad se podrían generar en todas las unidades de diálisis sin un esfuerzo excesivo. El Grupo de Calidad, está abierto a la colaboración en el desarrollo de modulos de indicadores específicos para otras bases de datos; con ello se conseguiría la integración de aquellos centros de diálisis que utilizan otros formatos.

Estos resultados preliminares demuestran la importancia de definir estándares que se ajusten de manera adecuada a las características de la población que estamos tratando y a los nuevos tratamientos disponibles, y de revisarlos y cambiarlos si es preciso periódicamente. Por otra parte permite compararnos con otros países, como se demuestra en la tabla 6 en la que se comparan los resultados del grupo español con los resultados de un amplio grupo de pacientes de USA, país con una larga trayectoria en monitorización y difusión de indicadores de calidad.

Podemos concluir que estamos avanzando en lo referente al conocimiento de los resultados de la hemodiálisis, aunque el trabajo pendiente todavía es extenso, y que la monitorización de indicadores de calidad respecto a un estándar y su puesta en común con otros centros puede contribuir a la mejora de resultados y a la disminución en la variabilidad entre centros.

Financiación y aportaciones:

Este trabajo se ha desarrollado gracias a la aportación económica de Amgen .

La empresa Visual-limes ha contribuido con el desarrollo del módulo de indicadores para el programa Nefrosoft® y la empresa Baxter con el desarrollo del módulo de indicadores de Renalsoft®, bajo las directrices del grupo de Gestión de Calidad.

La empresa BapHealth ha desarrollado todo el sistema de elaboración y emisión de informes a cada centro participante

Bibliografía
[1]
BIBLIOGRAFIA
[2]
[1] Ceballos M, López-Revuelta K, Saracho R, García López F, Castro P, Gutiérrez JA, Martín-Martínez E, Alonso R, Bernabéu R, Lorenzo V, Arias M, Sierra T, Estébanez C, Lara M, Clèries M, Vela E, García-Blasco MJ, Zurriaga O, Vázquez C, Sánchez-Casajús A, Rodado R, Ripoll J, Asín JL, Magaz A.. Dialysis and transplant patients Registry of the Spanish Society of Nephrology. Nefrologia. 2005;25(2):121-4, 126-9.
[4]
[2] Gorriz JL. Enfermedad renal crónica (ERC): detección, prevención y remisión adecuada a Nefrología. Nefrología Extrahospitalaria. 2004; 11: 13-18.
[5]
[3] Plantinga LC, Fink NE, Jaar BG, Sadler JH, Levin NW, Coresh J, Klag MJ, Powe NR. Attainment of clinical performance targets and improvement in clinical outcomes and resource use in hemodialysis care: a prospective cohort study. BMC Health Serv Res. 2007; 9;7:5 [Pubmed]
[6]
[4] Rocco MV, Frankenfield DL, Hopson SD, McClellan WM. Relationship between clinical performance measures and outcomes among patients receiving long-term hemodialysis. Ann Intern Med. 2006 ; 3;145 (7):512-9
[7]
[5] Fink JC, Zhan M, Blahut SA, Soucie M, Mc Cellan WM. Measuring the efficacy of a quality improvement program in dialysis adequacy with changes in center effects. J Am Soc Nephrol 2002; 13:2338-2344. [Pubmed]
[8]
[6] López Revuelta K, Barril G, Caramelo C, Delgado R, García López F, García Valdecasas J, Gruss E, Jiménez Almonacid P, Martínez Castelao A, Luis Miguel J, Ortiz A, Del Pino Y Pino MD, Portolés JM, Prados C, Sanz P, Tato A, Alvarez Ude F, Angoso M, Aranaz J, Arenas MD, Lorenzo S. Desarrollo de un sistema de monitorización clínica para hemodiálisis: propuesta de indicadores del grupo de gestión de Calidad de la SEN. Nefrologia. 2007;27(5):542-59
[9]
[7] G Barril, E Gonzalez-Parra, R Alcazar, MD Arenas, JM Campistol, C Caramelo, M Carrasco, V carreño, M Espinosa M, J Garcia Valdecasas, JL Górriz , MD López, L Martín, P Ruiz, JL Teruel . Guías sobre enfermedades víricas en hemodiálisis. Nefrología, 24: 43-66, 2004
[10]
[8] Maduel F. Guías Clínicas de Centros de Hemodiálisis. Nefrología 2006; 26 (supl 8): 1- 73.
[11]
[9] Rodriguez Hernandez JA, Gonzalez Parra E, Julian Gutierrez JM, et al. Vascular access guidelines for hemodialysis. Nefrologia 2005; 25(suppl 1):3-97. [Pubmed]
[13]
[10] Arenas MD, Alvarez-Ude F, Egea JJ, Gil MT, Amoedo ML, Millán I, Soriano A, Sirvent AE. Impacto de seguimiento de indicadores de calidad en hemodiálisis. Nefrología 2004;3:261-275
[15]
[11] Parra E, Ramos R, Betriu A, Paniagua J, Belart M, Martín F, Martínez T. Estudio prospectivo multicéntrico de calidad en hemodiálisis. Nefrología. 2006;26(6):688-694 [Pubmed]
[16]
[12] Cruz JM, Piera L, Bragg-Gresham JL, Feldman H, Port FK,. Resultados del estudio internacional de hemodiálisis DOPPS en Europa y España. Nefrología 2003; 5:437-443.
[17]
[13] Garcia López F, Saracho Rotaeche R. Cifras diana de hemoglobina en la insuficiencia renal crónica: evidencia y guías de práctica clínica. Nefrología. 2007; 27 (suplemento 5): 60-64
[18]
[14] Agencia española de medicamentos y productos sanitarios. Nota informativa del 26 de junio de 2008: Progresión tumoral, reducción de la supervivencia y riesgos cardiovasculares asociados a las epoetinas: nuevas recomendaciones de uso. Disponible en: http://www.agemed.es/actividad/alertas/usoHumano/seguridad/epoetina-junio08.htm
[19]
[15] Fishbane S, Berns JS. Evidence and implications of hemoglobin cycling in anaemia management. Nephrol Dial Transplant. 2007; 22: 2129-2132. [Pubmed]
[20]
[18] Arenas MD, Alvarez-Ude F, Gil MT, Soriano A, Egea JJ, Millan I, Amoedo ML, Muray S, Carreton MA. Application of NKF-K/DOQI Clinical Practice Guidelines for Bone Metabolism and Disease: changes of clinical practices and their effects on outcomes and quality standards in three haemodialysis units. Nephrol Dial Trasplant 2006 ;21: 1663-68.
[21]
[20] Rodríguez Hernandez JA, Gonzalez Parra E, Julián Gutiérrez JM, et al. Guía de acceso vascular para hemodiálisis. Nefrologia 2005; 25(suppl 1):3-97. [Pubmed]
[22]
[21] National Kidney Foundation. http://www.kidney.org/professionals/kdoqi/index.cfm. Accessed December 28, 2006.
[23]
[22] Jindal K, Chan CT, Deziel C, et al. Hemodialysis clinical practice guidelines for the Canadian Society of Nephrology. J Am Soc Nephrol 2006; 17(3 Suppl.1):S1-27. [Pubmed]
[24]
[23] Mc Clellan W, Frankenfield DL, Frederich PR, Flanders WD, Alfaro-Correa A, Rocco M, Helgerson D. Can dialysis therapy be improved? A report from ESRD Core Indicators Project. American Journal of Kidney Diseases 1999;6:1075-1082
Idiomas
Nefrología
Opciones de artículo
Herramientas
es en

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?